Se fue, se fue, se fue

La número diez del equipo económico Mex (verde) pide su cambio, con lágrimas en los ojos, corre el minuto 56 del partido decisivo del torneo T-MEC que se juega en la zona de Norteamérica. Al salir recibe una fría y desafiante actitud de su amado director técnico.

Los jugadores y las jugadoras del equipo Mex la ven salir azorados, sin ella toda la estrategia de juego queda al filo del barranco, se preguntan anonadados si tras su salida el Director Técnico los mantendrá en la cancha o serán rápidamente desplazados por el equipo B, aunque nadie sabe de su existencia, pero quizá en la sombra ya está armado.

Por lo pronto el partido queda suspendido, el equipo contrincante Usa (rojo), de manera caballerosa, espera la sustitución; urgiendo al árbitro que apresure al equipo Mex al cambio, no quieren que se enfríen sus elementos. Sospechan de una táctica dilatoria por parte del colmilludo director técnico del equipo Mex.

El partido transcurría de manera tensa, un primer tiempo en que nadie se lanzó a fondo, el marcador continuaba cero a cero. El equipo Mex comenzó con empuje tratando de hacer dominante su estrategia de defensa (de la soberanía) donde se siente muy fuerte, una especie de catenaccio con tintes de decolonización, que ha impuesto quien desde hace cuatro años dirige el equipo.

En el último tercio, del primer tiempo, el equipo Usa modifica su estrategia, pasa a colocar un delantero más, dos puntas y dos extremos: tres medios, dos creativos y un contención y tres defensas rápidos para evitar contragolpes: el juego empieza a balancearse a favor de los rojos que buscan vulnerar el recio catenaccio de los verdes, que se defienden, pero se ven cada vez más acosados por los embates de la delantera contrincante.

Termina el primer tiempo sin goles pero con claro dominio de los rojos encabezados por su lideresa.

En el intermedio, la diez verde urge al director técnico un cambio de línea, ya que la derrota está cerca, no es escuchada (nada raro por cierto), la instrucción es defender y defender y defender, sacar adelante el cero a cero obligando a un nuevo partido con árbitro neutral.

La presión del equipo rojo se hace cada vez más fuerte, los verdes se multiplican, sacan agua del pozo como pueden, pero es claro que tarde o temprano caerá un gol en su meta. La diez Mex voltea a la banca pidiendo cambios, solicitando delanteros para poder atacar, incólume el director necea con su claramente fallida propuesta de defensa.

Agotada mentalmente la heroica diez pide su cambio, no aparenta una lesión, ni cansancio, simplemente no quiere ser parte de una derrota, menos que le achaquen la misma cuando no pude desplegar sus habilidades y en su caso perder con dignidad.

Hay un enigma sobre quien sustituirá a la Diez, seguro tendrá el número 43 (aunque sea de mal agüero) algunos piensan en Romo, aunque fue desechado hace tiempo, pero nunca es tarde.

Lo que nadie duda es que el verde catenaccio seguirá vigente por lo menos hasta después de 2024 cuando habrá cambio en la cúspide.

La Diez declaró que se va a la porra, supongo se refería al sentido que le dan allende el Atlántico a dicha palabra.

Comentarios

  1. Aunque es bastante dramática la situación de ese juego, tu sentido del humor e ironía - sólo así se puede ver este partido- me ha hecho reír. Tu último párrafo lo dice todo.

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  2. Creo que además del futuro del T MEX está que la Clouthier se declaró en contra del ejército en la calle, sepa la bola.

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  3. Tal vez Tatiana le dijo a Gran Jefe Pluma-guinda que su argumento de la soberanía era indefendible y Gran Jefe se enojó...

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  4. Se parecen al actual equipo Pumas

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